Ropa de maternidad. 5 prendas imprescindibles para embarazo y lactancia que podrás seguir usando

El final del embarazo y el postparto son los momentos en los que más ropa nos vemos obligadas a comprar. Aunque creamos que podemos pasar sin ropa de maternidad, durante los últimos meses antes del parto el tamaño de la barriga puede hacer que cualquier prenda excepto la ropa para estar en casa te parezca un estorbo. Si sales de cuentas en verano te bastará con usar lo mínimo necesario y más cómodo. Pero si, por el contrario, te toca en invierno prepárate para hacer un buen desembolso en prendas de abrigo en las que la tripa te quepa sin problemas.

Si eres de las que lo pasa pipa probándose y comprando ropa, estás de enhorabuena, este es tu momento. Si, como yo, odias tener que andar de tienda en tienda, hoy te traemos unos consejos para elegir tu ropa de maternidad de forma que gastes el menor dinero y tiempo posibles y que, además, te valga como ropa de lactancia y puerperio.

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Pantalones de premamá. ¿Totalmente necesarios?

El gran problema de comprar pantalones premamá es que es muy probable que no vuelvas a usarlos excepto en otro embarazo. Por tanto es posible que comprarlos te parezca un gasto absurdo. Pero hay muchas prendas genéricas que te pueden valer después del embarazo. Si te toca en verano, puedes usar pantalones tipo harén, o vestidos amplios de los que se ciñen debajo del pecho para que tu tripa esté a sus anchas. Como no son prendas específicas de premamá, podrás seguir usándolas en el futuro.

Si te toca en invierno puedes optar por los pantalones de premamá con cintura desmontable. Son la mejor opción si no coges mucho peso durante el embarazo (aparte del que llevas en el útero, claro) ya que mantienen la tu talla de pantalón habitual. Vienen con varias cinturas de tamaños diferentes que se van acoplando con una cremallera. Solo tienes que ir cambiando las ampliaciones de la cintura según vaya creciendo el bebé. Pero los pantalones siguen siendo los mismos y podrás seguir usándolos en el postparto e incluso después. Porque mantener la talla después del embarazo es posible (en mi caso no cogí ni un kilo durante el embarazo. Aunque los cogí todos juntos el destete). Eso sí, si quieres saber cómo me libré por completo de las estrías en la tripa no dejes de leer el post sobre cómo conseguir un embarazo sin estrías.

Sujetador de lactancia, ¿qué talla compro?

Hazte a la idea de que en el postparto, cuando te suba la leche, vas a aumentar la talla de la copa de tus sujetadores. Si eres de las que ya ha notado el cambio al final del embarazo puedes arriesgarte a comprar sujetadores de lactancia con la talla que tienes antes de dar a luz. Si no… te recomiendo seguir usando los tuyos hasta que compruebes la talla que necesitas.

Por otro lado, has de tener en cuenta que durante los primeros meses vas a tener los pezones como un volcán y mucha sensación de hinchazón por lo que no es recomendable usar sujetadores de encaje que te puedan rozar. Hay sujetadores de lactancia, preciosos, lo sé, pero puedes dejarlos para más adelante. Si quieres seguir dando el pecho y consigues una lactancia exitosa tienes años por delante para comprarlos. Además, para ese momento tus tetas habrán vuelto a un tamaño más acorde al original y te podrás comprar sujetadores de lactancia que puedas seguir usando cuando ya hayas destetado.

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Camisetas interiores de lactancia. La ropa de maternidad más desconocida

Si no tienes mucho pecho, y te resulta cómodo ir sin aros, la mejor opción puede ser recurrir a camisetas interiores de lactancia en vez de sujetador. Su talla es más adaptable y podrás seguir usándolas en el futuro como camiseta de tirantes o interior.

Si embargo, para estar en casa, probablemente prefieras estar directamente sin presión en el pecho. En ese caso lo mejor es que te hagas con una buena colección de loungewear suave y cómoda. Especialmente en invierno. Porque si es verano lo normal es que prefieras directamente no usar nada en la parte de arriba.

Leggins premamá. Ropa de maternidad básica si sales de cuentas en invierno.

Si el final de tu embarazo cae en invierno pero no quieres tener que comprar mucha ropa específica de premamá lo mejor es combinar los vestidos anchos de verano con unas mallas de premamá y una camiseta grande de manga larga debajo. Los leggins premamá son super cómodos y calentitos para la tripa y los puedes seguir usando en el postparto porque al ser elásticos, aunque te sobre un poco en la tripa te seguirán resultando cómodos.

Abrigo de lactancia desmontable. Para embarazo, para lactancia… y para siempre.

Otra prenda totalmente necesaria en invierno es el abrigo. Pero comprar un abrigo premamá al uso es un gasto absurdo. Lo mejor es que compres un abrigo de porteo con aplique desmontable en el centro. De esta forma tienes un abrigo 3 en 1 que te servirá tanto antes del parto como después. La zona central se puede quitar y el abrigo cierra a una talla normal por lo que podrás seguir usándolo cuando ya no lleves tanto peso encima. Es una prenda que te servirá para toda la maternidad.

¿Y tú? ¿Conocías todas estas prendas de ropa de maternidad?

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